domingo, 8 de marzo de 2009

SANGRE EN EL ESPEJO DE LA REINA


KATHERINE MANLLEUS



Un frío embellecedor cortaba el aire del gran pabellón, donde las agujas de un reloj, hicieron sonar la última campanada de aquel día. La noche se mostraba oscura, tenebrosa y con apariencias de crueldad. Allí donde las luces proyectadas por la luna llegaban, se dejaba ver una dama, que con su mas fiero poder, hacía manifiesto de su crueldad y avaricia en el cuerpo de una doncella. Al acabar con el acto, lo único que quedó de ella, fue un cuerpo de sangre robada para obtener su belleza. En mitad de la noche se descubría a Katherine Malleus, la reina, enterrando a su víctima...
A la mañana siguiente la reina fue al pueblo donde vio y se encaprichó de una joven campesina la cual tenía una piel de porcelana y unos ojos verdes esmeralda, con una larga melena pelirroja que le caía hasta la cintura. La campesina estaba riéndose con un apuesto joven. La reina enseguida le envidió su admirable belleza y se dirigió hacia a ella proponiéndole si quería trabajar para ella en su enorme palacio. La campesina impresionada no dudó ni un segundo y aceptó, ella se despidió de su familia y de su dulce amado besándole intensamente, ya que debería pasar una lejana temporada en palacio sin ver a sus seres queridos.
La campesina entusiasmada con la idea, llegó muy feliz a palacio, sacaría el dinero suficiente para mandárselo su familia. Durante los primeros días la reina se mostraba amable, pero con el tiempo comenzó a cambiar su forma de comportarse hacia ella, humillándola en público y haciéndole la vida imposible. A los seis meses la campesina ya no pudo soportar más el comportamiento que tenía la reina con ella, así que nerviosa y temblorosa se dirigió a la habitación de su señora.
Cuando entró allí se encontró a la reina tumbada en un divan de terciopelo rojo y con una copa de vino en la mano. La campesina le explicó todo el sufrimiento que había vivido los últimos seis meses y su idea de marchar de palacio y regresar junto su familia de nuevo y cuanto antes. La reina dejó la copa sobre una pequeña mesa cuando vio que la pobre doncella empezó a derramar lágrimas. "Perdóname, querida... si he sido cruel contigo, lo siento... deja que sequen tus lágrimas de esos hermosos ojos" dijo la reina muy hipocritamente mientras acercaba a la doncella al espejo agárrandola de los hombros. En la fría mano derecha de la reina hallaba un puñal con el que rasgó con toda su rabia el delicado cuello de aquella bella campesina. La sangre salpicó con abundancia en el rostro de la reina que se reflejaba en el espejo, y el cuerpo de la frágil doncella se desplomó al suelo. La reina cortó la cabellera de la campesina sin un apice de arrepentimiento, y abrió un enorme armario donde tenía una colección de pelucas que ella misma había confeccionado de todas sus víctimas. Aquello era para ella su privada colección de trofeos.
El amado y la familia de la joven empezaron a preocuparse después de no haber visto a la campesina durante unos meses y sin tener noticias de ella, así pues empezaron a investigar, aunque por desgracia no conseguieron nada. Un buen día creyeron verla de espaldas, aunque cuando se giró era la mismisima reina, que lucía aquella preciosa y larga peluca pelirroja que había hecho con el pelo de su última víctima. Su familia y su amado empezaron a sospechar temiendo lo peor. Entonces comenzaron a circular rumores por el pueblo referentes a la reina, y oyeron decir a unos artesanos que mataba a jovenes doncellas y hacía pelucas con sus hermosas cabelleras. El honor y el valor salieron de la familia de la campesina y de su triste amado, en proponer al pueblo asaltar el palacio y condenar a la reina. Y así pues el pueblo pidió justicia por todas aquellas atrocidades cometidas contra aquellas jovenes doncellas. Katherine Maellus fue ajusticiada y quemada en la hoguera por los ciudadanos del pueblo, condenándole de brujería y vengando todas aquellas muertes de aquellas pobres e infelices doncellas...


LORENA LEÓN 3º D

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